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¿Qué es el Drenaje Linfático Post-Liposucción y en qué consiste?
El sistema linfático se encarga de reabsorber lo que no es capaz, el capilar sanguíneo. Sus vasos se encargan de reabsorber el exceso de líquido (edema) que se forman en los tejidos. Los efectos del DLM son de relajación y analgesia. El objetivo final es activar la circulación de la linfa para que esta no se estanque ni se sature de sustancias de desecho. Las manipulaciones van dirigidas a favorecer el paso de la linfa hacia los ganglios regionales, por ello es una de las técnicas de drenaje de liquidos idónea para la recuperación tras la cirugía.
¿Cuáles son los beneficios del Drenaje Linfático Post-Liposucción?
Estos son algunos de los múltiples beneficios del drenaje linfático post-liposucción:
- Acelera la reabsorción del edema.
- Elimina restos de medicación, sueros utilizados en la cirugía estética.
- Favorece la regeneración de capilares y vasos linfáticos dañados tras la liposucción.
- Disminuye las molestias.
- Acelera la recuperación de los tejidos.
- Mejora el estado de la piel.
- Acelera la reabsorción de zonas fibrosas.
Además, el Drenaje Linfático también está indicado en tratamientos del área estética y post-operatorios como:
- Liposucciones.
- Abdominoplastias.
- Operaciones de mama (mastectomías).
- Cirugías faciales (rinoplastia, lifting, blefaroplastia...)
- Acné.
- Celulitis. Entre otras.
